sábado, 26 de diciembre de 2009


“Si no fueras como niño, no tendrás entrada en mi Reino”
Hasta los niños saben el tiempo que viene. Ayer miraba a Abigail, mi sobrinita, de 7 años con que esperanza añoraba la hora de la medianoche, ella era la única entre adultos, adolescentes y jóvenes que decía lo que sentía. Creo que todos igual esperábamos que llegue Navidad, pero ya no tenemos la alegría o la honestidad de un niño que espera con ansías un regalo. Pienso que Abigail ya no cree en lo del viejito pascuero, el hombre vestido de rojo que trae obsequios, ella sabe la verdad, pero la evita para ser feliz. ¿No hizo lo mismo Jesús? Sabía que moriría, que entregaría su vida en el Calvario, pero siguió la ruta trazada; cenó con los doce, incluyendo al traidor, al mentiroso y al adulador, y por supuesto, a los cobardes.
Resuena esta palabra, sino fueras como niño. Cada vez era menor el tiempo que faltaba para las 12 de la noche. Que lindo es un hogar con niños, son la esencia del detalle que tanto nos falta LA INOCENCIA. Ha medida que crecemos nos tornamos dramáticos y malhumorados, ya no creemos en milagros y no vemos lo que Dios nos desea mostrar. Abigail, nos mantuvo en la Navidad, porque nuestros temas eran Política, Familia, Noticias, consejos, etc., pero del nacimiento de Jesucristo NADA. Los niños, en realidad conocen el tiempo mejor que nosotros.